Mellie sigue intentando recobrase de la repercusión pública del último año y decide a conceder una entrevista. Mientras tanto, Cyrus continúa conspirando contra Sally Langston, y nos enteramos de cómo Fitz, Mellie and Cyrus formaron equipo político. Huck sigue manteniendo a Quinn al margen, aunque la sed de sangre de ella podría llevarla a situaciones peligrosas.